Las emociones durante el des/confinamiento
En este post os presento una selección de cuentos que ayudan a los niños y niñas a gestionar sus emociones durante este periodo.
La situación a la que nos ha empujado la pandemia es nueva para todos, pero quizás especialmente difícil para los menores, que aún no cuentan con referentes para comprenderla ni han adquirido los recursos emocionales necesarios para afrontarla.
En muchos casos, a esta situación se suman factores de estrés añadido, como restricciones en las salidas a la calle, la pérdida de un ser querido o el ambiente de inseguridad y miedo que transmitimos, aun sin quererlo, los adultos.
¿Cómo podemos ayudarles a gestionar una situación tan compleja?
El apoyo y la guía emocional pueden partir, en primer lugar, del propio ejemplo. Transmitimos información no solamente a través de lo que decimos, sino también, principalmente, mediante la actitud y el lenguaje no verbal: no olvidemos reconocer y aceptar nuestras propias emociones. Todas ellas son válidas y precisan su espacio. Así, podremos generar para los más pequeños un lugar de calma y encuentro, donde será más fácil conectar.
Contar cuentos para entender la situación
A continuación podemos utilizar los libros, contar y compartir historias. Las narraciones curan y guían. Ayudan también a iniciar una conversación y nos dan claves para canalizarla productivamente.
La selección que sigue tiene tres objetivos:
- Redefinir la casa como espacio lúdico (o, como diría mi abuela, hacer de la necesidad virtud): aprovechemos este tiempo para desarrollar las capacidades y recursos que sí pueden practicarse en interiores.
- Reconocer, aceptar y gestionar emociones difíciles, como la pérdida y el duelo.
- Poner en perspectiva: esta situación es transitoria. Podemos, desde ella, imaginar el futuro, hacer planes, asomarnos a ese mundo que sigue ahí.
¿Empezamos?
Cuentos que ayudan a gestionar emociones
1. La creatividad, el recurso más valioso
No es una caja, de Antoinette Portis. Editorial Kalandraka.
(A partir de 3 años)
Pese a la creciente flexibilidad en las salidas a la calle, la mayoría de niños y niñas se encuentra todavía con más tiempo dentro de casa del que están acostumbrados. Desde aquí, no obstante, podemos explorar y disfrutar sin grandes recursos ni complicaciones: la autora de este cuento propone un viaje de la imaginación y un sinfín de posibilidades de juego con… una caja.
Es que, como diría el protagonista… no es una caja.
La montaña de libros más alta del mundo, de Rocío Bonilla. Algar editorial.
(A partir de 6 años)
La lectura contribuye a desarrollar capacidades como la imaginación, la empatía o la concentración.
Este cuento es un canto de amor a los libros y transmite un mensaje que resulta válido siempre, pero tiene hoy especial relevancia: a través de la página escrita podemos experimentar el mundo, vivir mil aventuras.

Una historia para aprender que, cuando las cosas no son como quisiéramos… podemos verlas de otra manera.
2. Gestionar la pérdida y el duelo
El árbol de los recuerdos, de Britta Teckentrup. Editorial Nube 8.
(A partir de 4 años)
El duelo es un proceso especialmente difícil de gestionar, sobre todo si nos topamos con él en la infancia y de repente, como por desgracia es el caso de muchas familias durante esta crisis.

Britta Teckentrup ha escrito un libro bellísimo que propone un modo de transitar esta situación comprensible para los niños y niñas. La narración se orienta a reconocer y aceptar la tristeza: cuando muere Zorro, todos los animales del bosque se acompañan unos a otros, contando sus recuerdos.
Surgen entonces otros sentimientos: el alivio y la aceptación, la gratitud por el papel que su querido amigo desempeñó en sus vidas. Un árbol surge de sus recuerdos y, de alguna manera, mantiene a Zorro en el bosque, con todos ellos.
Para siempre, de Camino García y Marco Recuero. Autoeditado.
Este libro logra el dificilísimo equilibrio de hablar de la muerte de un modo claro pero consolador. Nombra y describe la pérdida y los sentimientos asociados a la misma, sin evitar el dolor y la confusión que implican las diferentes explicaciones que suelen recibir los niños y niñas cuando acaece la pérdida de un un ser querido.

Un libro para leer con calma, para sentir, compartir y aprender, a todas las edades.
3. El mundo en que vivimos
Un árbol, de Rodrigo Mattioli. Editorial Apila.
(A partir de 3 años)
Un árbol es el álbum ganador del Premio Apila Primera Impresión de 2019. Una reflexión divertida sobre el valor de la naturaleza y lo importante que resulta nuestra intervención en el medio ambiente.
Para aprender desde pequeños a observar, respetar, cuidar y amar este mundo nuestro.
Atlas del mundo, de Alexandra Mizielinska y Daniel Mizielinski. Editorial Maeva Young.
(A partir de 8 años)
Este libro lleva el subtítulo “Un insólito viaje por las mil curiosidades y maravillas del mundo”, y eso es justamente lo que encontramos dentro.

El mundo en general, también el de los niños y niñas, parece haberse vuelto más estrecho con las restricciones derivadas de la pandemia. Incluso un poco raro: algunos menores desconfían al salir a la calle, a un espacio que percibían antes como seguro.
Por eso, es un buen momento para contraponer a esa inquietud una idea más amplia del mundo, que podemos recorrer también a través de las páginas de un libro. Alimentar la esperanza, la curiosidad, el aprendizaje y una idea positiva del futuro: ¿Adónde les gustaría ir, cuando llegue el momento?
Hasta aquí la selección de estrategias y cuentos para gestionar emociones durante estos tiempos tan raros. Espero que os haya resultado útil.
También podéis optar por contarles su propia historia, a vuestra manera. En ese caso, ¡os ayudo! ¿Que cómo? Podéis echar un ojo a la sección de cuentos de los encargos especiales o mirar el proyecto Una casa en la montaña, una historia que ya está con sus dueños.
¡Hasta pronto!

Sol García Prats
es doctora en literatura y educadora infantil.